Solamente un profesional de la salud mental, preferiblemente especializado en trastornos de la personalidad, puede determinar su presencia mediante el correspondiente proceso diagnóstico. En este proceso, aunque exista un apoyo en herramientas como los tests (destacando, por ejemplo, el MCMI de Millon o la entrevista estructurada SCID), lo más determinante es el cara a cara del paciente con el profesional y toda la información que éste recabe.

En todo caso, a efectos de que exista una mayor información sobre estas patologías y de que el individuo pueda dirigirse a un profesional para confirmar sus propias hipótesis, vamos a exponer una serie de tipologías, frases o rasgos de sujetos imaginarios que pueden alertar al propio interesado o a sus familiares, sabiendo que cabe la posibilidad de que un individuo reúna rasgos de más de uno de estos ejemplos. Las breves definiciones que figuran a continuación servirán a modo de guía, sabiendo que habrá trastornos que cuadren en más de una de estas frases:

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

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